25.8.10

Que nos parta un rayo

Existen cielos que yo jamás veré, de blancas nubes con cuellos de cisne que parecen emerger de la tierra como níveas flores. Los he buscado de estación en estación, llegué a Madrid, Nueva York y Estambul pero no llego a una conclusión, ya se han confirmado mis temores.

¿Me pregunto dónde estarás?
¿Me pregunto por qué no estás aquí?
Si me haces falta hoy que una guerra va a estallar

...Dicen son tiempos de paz, pero sólo es lo que algunos llaman paz, y sé que niña tienes miedo. Sé que lo tienes, sé que yo lo tengo y sé que las noches sin ti son un infierno.

Y duelen las horas en la oscuridad, y fumo diez mil cigarrillos y sé que mi voz quebrarán, y rezo y voy dibujando en ceniza una cruz, que súbitamente caiga un rayo y se haga la luz.

...y duelen las horas y yo le rezo a mi Dios 
que súbitamente un rayo nos parta a los dos,
que súbitamente un rayo nos mate a los dos,
que súbitamente un rayo nos fulmine a los dos.

Mata a un gatito